Desarrolla UAT proyecto de bioingeniería para la restauración de suelos

Con el objetivo de establecer la importancia de plantas nativas como una alternativa ecológica para controlar la erosión del suelo y protegerlo de las laderas, investigadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) trabajan en un proyecto de bioingeniería para el área natural protegida Altas Cumbres, en el municipio de Victoria.

Al respecto, la investigadora Dra. Laura Rosa Margarita Sánchez Castillo, con la incorporación de la estudiante extranjera Thais Correa de Assis, del programa de Maestría en Ciencias, Sistemas Agropecuarios y Medio Ambiente de la Facultad de Ingeniería y Ciencias (FIC), desarrollan un proyecto para determinar las propiedades morfológicas, mecánicas y ecológicas de plantas nativas.

Por su parte, la investigadora de la UAT explicó que se contempla la restauración y conservación de suelos en las zonas del Cañón del Novillo, Cañón de Calamaco y Cañón de la Peregrina, mediante el uso de especies vegetales, técnica empleada especialmente en Asia y Europa.

Dio a conocer que la bioingeniería de suelos es una ciencia que utiliza plantas como principal elemento estructural de recuperación, ya que reducen el impacto de la lluvia, disminuyen el escurrimiento superficial y aumentan la fijación del suelo mediante el anclaje de sus raíces.

Entre otros aspectos, resaltó que es una técnica reducida en costos, comparada con las que usan materiales inertes como medio de soporte, lo cual trae consigo esperanza en soluciones a países en vías de desarrollo que sufren constantemente de problemas de erosión y movimientos superficiales en masa.

Por último, la Dra. Laura Sánchez dio a conocer que, al ser un área de investigación liderada principalmente por mujeres en nuestro país, representa una oportunidad de incorporar a la investigación científica a jóvenes estudiantes y jóvenes investigadoras, incrementando cada vez más las filas de mujeres mexicanas y extranjeras interesadas en el desarrollo científico de nuestro país.​

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Investigadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) han desarrollado una propuesta innovadora y sostenible orientada al aprovechamiento de residuos vegetales para la obtención de pigmentos naturales. 

En respuesta a la creciente preocupación por los impactos negativos de los productos sintéticos en la salud humana y el medio ambiente, esta iniciativa se presenta como una alternativa ecológica y económicamente viable, ofreciendo soluciones aplicables a diversas industrias, como la alimentaria, textil y artística.

El equipo de investigación de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la UAT, liderado por Edmar Meléndez Jaramillo, Laura Sánchez Castillo, Ma. Teresa de Jesús Segura Martínez y Rafael Delgado Martínez, destaca que los residuos agrícolas como cáscaras, hojas, tallos y raíces contienen compuestos útiles para producir pigmentos naturales de diferentes colores. 

Entre los más comunes se encuentran los pigmentos verdes de la espinaca, rojos de la remolacha, morados de la col morada y amarillos del azafrán, todos ellos con propiedades antioxidantes y antibacterianas.

Detallan que, el proceso de extracción de los pigmentos es sencillo y accesible. Las plantas se desinfectan, se deshidratan a temperaturas controladas y luego se muelen para obtener los pigmentos, los cuales pueden utilizarse en alimentos, acuarelas o textiles. 

Esto –añaden– abre un abanico de posibilidades tanto para la industria como para los consumidores conscientes del medio ambiente.

Los investigadores también proponen que otras fuentes menos convencionales, como ciertos insectos y minerales, pueden ser utilizadas para obtener pigmentos naturales. Un ejemplo de esto es la grana cochinilla, que se utiliza para obtener tonalidades rojas, o las arcillas rojas para crear pigmentos marrones.

Esta investigación busca replantear antiguas técnicas de extracción de pigmentos y promover una economía circular que maximice el aprovechamiento de los recursos agrícolas.

Además de ser más seguros y sostenibles, los pigmentos naturales no requieren productos químicos sintéticos en su producción, lo que evita la contaminación. Al mismo tiempo, permiten aprovechar recursos que de otro modo se desperdiciarían, otorgándoles un valor económico adicional.