Recibe Universidad Tecnológica de Nuevo Laredo tren de fuerza motriz como donación de la Asociación de Transportistas de Carga

Nuevo Laredo, Tamaulipas.– La Universidad Tecnológica de Nuevo Laredo (UTNL), recibió de parte de la Asociación de Transportistas de Carga (ATC), un tren de fuerza motriz de tracto-camión para que las y los alumnos puedan realizar su prácticas en la institución.

En representación del presidente de la asociación de transportistas, Carlos Fernández Martínez, el consejero del organismo, Pedro Lozano, anunció la donación de dicha maquinaria ante directivos de la universidad, liderados por el rector del plantel, José Antonio Tovar Lara.

El rector explicó que el tren de fuerza motriz de tracto-camión lo utilizarán las y los estudiantes de la carrera de Técnico Superior Universitario en Mantenimiento a Maquinaria Pesada, así como los de la Ingeniería en Mantenimiento Industrial, quienes podrán realizar prácticas tecnológicas y elevar así el nivel de capacitación de las y los egresados, lo que permitirá insertarse con mayor éxito al campo laboral del mantenimiento a unidades de autotransporte.

Reiteró el agradecimiento a la Asociación de Transportistas de Carga por esta importante donación para la universidad y resaltó el respaldo que la institución recibe del gobernador Américo Villarreal Anaya, y mediante la Secretaría de Educación, impulsa firmemente la educación superior en Tamaulipas.

Por su parte el representante de ATC, Pedro Lozano, manifestó que en la asociación están muy interesados en respaldar a las y los alumnos de carreras afines al sector transportista, con la finalidad de que cuenten con las mejores herramientas para su desarrollo profesional.

Con el tren de fuerza motriz de tracto-camión la Universidad Tecnológica de Nuevo Laredo podrá también impartir cursos a trabajadores de las empresas de transporte que laboran en sus talleres de mantenimiento a tractocamiones.

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Investigadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) han desarrollado una propuesta innovadora y sostenible orientada al aprovechamiento de residuos vegetales para la obtención de pigmentos naturales. 

En respuesta a la creciente preocupación por los impactos negativos de los productos sintéticos en la salud humana y el medio ambiente, esta iniciativa se presenta como una alternativa ecológica y económicamente viable, ofreciendo soluciones aplicables a diversas industrias, como la alimentaria, textil y artística.

El equipo de investigación de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la UAT, liderado por Edmar Meléndez Jaramillo, Laura Sánchez Castillo, Ma. Teresa de Jesús Segura Martínez y Rafael Delgado Martínez, destaca que los residuos agrícolas como cáscaras, hojas, tallos y raíces contienen compuestos útiles para producir pigmentos naturales de diferentes colores. 

Entre los más comunes se encuentran los pigmentos verdes de la espinaca, rojos de la remolacha, morados de la col morada y amarillos del azafrán, todos ellos con propiedades antioxidantes y antibacterianas.

Detallan que, el proceso de extracción de los pigmentos es sencillo y accesible. Las plantas se desinfectan, se deshidratan a temperaturas controladas y luego se muelen para obtener los pigmentos, los cuales pueden utilizarse en alimentos, acuarelas o textiles. 

Esto –añaden– abre un abanico de posibilidades tanto para la industria como para los consumidores conscientes del medio ambiente.

Los investigadores también proponen que otras fuentes menos convencionales, como ciertos insectos y minerales, pueden ser utilizadas para obtener pigmentos naturales. Un ejemplo de esto es la grana cochinilla, que se utiliza para obtener tonalidades rojas, o las arcillas rojas para crear pigmentos marrones.

Esta investigación busca replantear antiguas técnicas de extracción de pigmentos y promover una economía circular que maximice el aprovechamiento de los recursos agrícolas.

Además de ser más seguros y sostenibles, los pigmentos naturales no requieren productos químicos sintéticos en su producción, lo que evita la contaminación. Al mismo tiempo, permiten aprovechar recursos que de otro modo se desperdiciarían, otorgándoles un valor económico adicional.