Lidera Tamaulipas en crecimiento de actividad industrial

Lidera Tamaulipas en crecimiento de actividad industrial

El Indicador Mensual de la Actividad Industrial del INEGI reportó un crecimiento anual del 12.7%

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Tamaulipas se ubicó como el estado con el mayor crecimiento del sector secundario, el cual registró una variación anual de 12.7% de acuerdo con el Indicador Mensual de la Actividad Industrial por Entidad Federativa (IMAIEF) publicado por el INEGI.

Ninfa Cantú Deándar secretaria de Economía señaló que este incremento fue favorecido por aumentos en los sectores de manufacturas y de minería que en el décimo mes del año reportaron un dinamismo que se reflejó en el resto de la industria en el estado.

"El crecimiento registrado en el sector industrial del estado se debió entre otros factores, a aumentos en los pedidos manufactureros de los mercados internacionales, la expansión de empresas establecidas y al inicio de nuevos proyectos de inversión".

La titular de la dependencia estatal señaló que uno de los ejes centrales de la política económica del gobernador Américo Villarreal es acompañar a la industria establecida en las diferentes regiones productivas del estado donde las nuevas inversiones se han dirigido a sectores estratégicos como Automotriz, Eléctrico Electrónicos, Químico - Petroquímico, Aeroespacial, Logística, Médico, Semiconductores y Alimentación.

Al señalar que el 60% de los proyectos de inversión confirmados en Tamaulipas están relacionados con la actividad industrial, Cantú Deándar dijo que este sector es un pilar de la economía del estado donde se emplean 465 mil tamaulipecos, el 28% de la población ocupada.

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Investigadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) han desarrollado una propuesta innovadora y sostenible orientada al aprovechamiento de residuos vegetales para la obtención de pigmentos naturales. 

En respuesta a la creciente preocupación por los impactos negativos de los productos sintéticos en la salud humana y el medio ambiente, esta iniciativa se presenta como una alternativa ecológica y económicamente viable, ofreciendo soluciones aplicables a diversas industrias, como la alimentaria, textil y artística.

El equipo de investigación de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la UAT, liderado por Edmar Meléndez Jaramillo, Laura Sánchez Castillo, Ma. Teresa de Jesús Segura Martínez y Rafael Delgado Martínez, destaca que los residuos agrícolas como cáscaras, hojas, tallos y raíces contienen compuestos útiles para producir pigmentos naturales de diferentes colores. 

Entre los más comunes se encuentran los pigmentos verdes de la espinaca, rojos de la remolacha, morados de la col morada y amarillos del azafrán, todos ellos con propiedades antioxidantes y antibacterianas.

Detallan que, el proceso de extracción de los pigmentos es sencillo y accesible. Las plantas se desinfectan, se deshidratan a temperaturas controladas y luego se muelen para obtener los pigmentos, los cuales pueden utilizarse en alimentos, acuarelas o textiles. 

Esto –añaden– abre un abanico de posibilidades tanto para la industria como para los consumidores conscientes del medio ambiente.

Los investigadores también proponen que otras fuentes menos convencionales, como ciertos insectos y minerales, pueden ser utilizadas para obtener pigmentos naturales. Un ejemplo de esto es la grana cochinilla, que se utiliza para obtener tonalidades rojas, o las arcillas rojas para crear pigmentos marrones.

Esta investigación busca replantear antiguas técnicas de extracción de pigmentos y promover una economía circular que maximice el aprovechamiento de los recursos agrícolas.

Además de ser más seguros y sostenibles, los pigmentos naturales no requieren productos químicos sintéticos en su producción, lo que evita la contaminación. Al mismo tiempo, permiten aprovechar recursos que de otro modo se desperdiciarían, otorgándoles un valor económico adicional.