La UAT y el INAH fortalecen lazos para la conservación del patrimonio cultural

El C. P. Guillermo Mendoza Cavazos, rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), firmó un convenio de colaboración con el antropólogo Diego Prieto Hernández, director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), con la finalidad de que los expertos de esta casa de estudios participen en las acciones para la conservación del patrimonio histórico y cultural que desarrolla el organismo en la entidad.

El evento se llevó a cabo en el Centro de Gestión del Conocimiento del Campus Victoria, y contó con la presencia del doctor Eduardo Arvizu Sánchez, secretario general de la UAT; del doctor Gildardo Herrera Sánchez, director de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo; y de la arqueóloga Tonantzin Silva Cárdenas, directora del Centro INAH Tamaulipas.

Al resaltar la importancia del acuerdo, Mendoza Cavazos dijo que la Universidad busca fomentar la cultura entre sus estudiantes, conscientes de la relevancia que conlleva formar profesionales comprometidos con su entorno.

Señaló también que la casa de estudios trabaja en un nuevo modelo educativo que complemente la formación de los universitarios, en donde se tiene como parte fundamental las expresiones culturales.

“Darles estas herramientas para difundir la importancia del trabajo del INAH y del patrimonio histórico, puesto que es obligación de la Universidad fomentar esos valores en los estudiantes para que, como egresados, sean más comprometidos con su entorno”, indicó.

Por su parte, Prieto Hernández comentó que el convenio con la UAT forma parte de los esfuerzos para fortalecer el trabajo de esta institución en el país, sumando proyectos con instituciones de educación superior con reconocimiento nacional. “Venimos a ofrecer nuestra contribución para fortalecer, cuidar y defender el patrimonio y la diversidad cultural de Tamaulipas”, acotó.

“Que podamos hacer un trabajo cultural de cara al reconocimiento del estudio, y a la valoración del patrimonio cultural tamaulipeco mucho más fuerte y con muchos mejores logros”, asentó.

Finalmente, puntualizó que el impulso al trabajo de conservación del patrimonio cultural en Tamaulipas se va a reforzar con los centros regionales del INAH Nuevo León, Coahuila y San Luís Potosí.

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Investigadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) han desarrollado una propuesta innovadora y sostenible orientada al aprovechamiento de residuos vegetales para la obtención de pigmentos naturales. 

En respuesta a la creciente preocupación por los impactos negativos de los productos sintéticos en la salud humana y el medio ambiente, esta iniciativa se presenta como una alternativa ecológica y económicamente viable, ofreciendo soluciones aplicables a diversas industrias, como la alimentaria, textil y artística.

El equipo de investigación de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la UAT, liderado por Edmar Meléndez Jaramillo, Laura Sánchez Castillo, Ma. Teresa de Jesús Segura Martínez y Rafael Delgado Martínez, destaca que los residuos agrícolas como cáscaras, hojas, tallos y raíces contienen compuestos útiles para producir pigmentos naturales de diferentes colores. 

Entre los más comunes se encuentran los pigmentos verdes de la espinaca, rojos de la remolacha, morados de la col morada y amarillos del azafrán, todos ellos con propiedades antioxidantes y antibacterianas.

Detallan que, el proceso de extracción de los pigmentos es sencillo y accesible. Las plantas se desinfectan, se deshidratan a temperaturas controladas y luego se muelen para obtener los pigmentos, los cuales pueden utilizarse en alimentos, acuarelas o textiles. 

Esto –añaden– abre un abanico de posibilidades tanto para la industria como para los consumidores conscientes del medio ambiente.

Los investigadores también proponen que otras fuentes menos convencionales, como ciertos insectos y minerales, pueden ser utilizadas para obtener pigmentos naturales. Un ejemplo de esto es la grana cochinilla, que se utiliza para obtener tonalidades rojas, o las arcillas rojas para crear pigmentos marrones.

Esta investigación busca replantear antiguas técnicas de extracción de pigmentos y promover una economía circular que maximice el aprovechamiento de los recursos agrícolas.

Además de ser más seguros y sostenibles, los pigmentos naturales no requieren productos químicos sintéticos en su producción, lo que evita la contaminación. Al mismo tiempo, permiten aprovechar recursos que de otro modo se desperdiciarían, otorgándoles un valor económico adicional.