Firman convenio para fortalecer la educación de atletas tamaulipecos

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-En un paso significativo para el desarrollo del deporte y la educación en Tamaulipas, el director general del Instituto del Deporte, Manuel Virués Lozano firmó un convenio de colaboración con la Universidad del Valle de México campus Ciudad Victoria (UVM), el cual traerá múltiples beneficios para atletas de alto rendimiento, sus familias y la comunidad estudiantil.

En representación de la UVM, participaron en la firma del acuerdo, el rector Rafael Esaú Saldívar Muñoz y la directora académica en Educación Superior, Claudia Aguilera Melchor. Este convenio permitirá que estudiantes de la universidad realicen sus prácticas profesionales y servicio social en beneficio del deporte, especialmente en áreas de medicina, fisioterapia, psicología, enfermería y salud bucal, contribuyendo así al bienestar de las y los atletas.

Además, se abordó la implementación de becas para deportistas de alto rendimiento y la apertura de más opciones académicas para los atletas tamaulipecos, ya que podrán acceder a programas de licenciatura en línea, lo que les permitirá continuar con su formación profesional sin afectar su preparación y competencias.

Virués Lozano señaló que estas acciones son con el objetivo de evitar la fuga de talento a otros estados y brindarles mayores oportunidades de formación.

Asimismo, dijo, se estableció el compromiso de colaboración interinstitucional en eventos deportivos, fortaleciendo el vínculo entre la academia y deporte social y alto rendimiento.

Por último, reiteró que se busca mejorar las condiciones de las y los atletas tamaulipecos, y fomentar una cultura de apoyo integral donde el deporte y la educación vayan de la mano, tal y como lo ha instruido el gobernador Américo Villarreal Anaya.

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Desarrolla la UAT alternativa para la producción de pigmentos naturales

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Investigadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) han desarrollado una propuesta innovadora y sostenible orientada al aprovechamiento de residuos vegetales para la obtención de pigmentos naturales. 

En respuesta a la creciente preocupación por los impactos negativos de los productos sintéticos en la salud humana y el medio ambiente, esta iniciativa se presenta como una alternativa ecológica y económicamente viable, ofreciendo soluciones aplicables a diversas industrias, como la alimentaria, textil y artística.

El equipo de investigación de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la UAT, liderado por Edmar Meléndez Jaramillo, Laura Sánchez Castillo, Ma. Teresa de Jesús Segura Martínez y Rafael Delgado Martínez, destaca que los residuos agrícolas como cáscaras, hojas, tallos y raíces contienen compuestos útiles para producir pigmentos naturales de diferentes colores. 

Entre los más comunes se encuentran los pigmentos verdes de la espinaca, rojos de la remolacha, morados de la col morada y amarillos del azafrán, todos ellos con propiedades antioxidantes y antibacterianas.

Detallan que, el proceso de extracción de los pigmentos es sencillo y accesible. Las plantas se desinfectan, se deshidratan a temperaturas controladas y luego se muelen para obtener los pigmentos, los cuales pueden utilizarse en alimentos, acuarelas o textiles. 

Esto –añaden– abre un abanico de posibilidades tanto para la industria como para los consumidores conscientes del medio ambiente.

Los investigadores también proponen que otras fuentes menos convencionales, como ciertos insectos y minerales, pueden ser utilizadas para obtener pigmentos naturales. Un ejemplo de esto es la grana cochinilla, que se utiliza para obtener tonalidades rojas, o las arcillas rojas para crear pigmentos marrones.

Esta investigación busca replantear antiguas técnicas de extracción de pigmentos y promover una economía circular que maximice el aprovechamiento de los recursos agrícolas.

Además de ser más seguros y sostenibles, los pigmentos naturales no requieren productos químicos sintéticos en su producción, lo que evita la contaminación. Al mismo tiempo, permiten aprovechar recursos que de otro modo se desperdiciarían, otorgándoles un valor económico adicional.