Realiza la UAT estudios científicos en cuerpos de agua de la zona sur de Tamaulipas

Investigadores de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) realizan una serie de estudios en los cuerpos de agua de la zona que comprende los municipios de Tampico, Madero y Altamira, con la finalidad de elaborar planes de protección y conservación para estos espacios naturales.

Al respecto, la Dra. Mireya Alicia Rosas Lusett, líder del Cuerpo Académico de Urbanismo y Medio Ambiente, dijo que los proyectos corresponden al área de sustentabilidad urbana y pretenden emitir recomendaciones para que el crecimiento de las ciudades no afecte a los cuerpos de agua presentes en la zona conurbada.

Detalló que el proyecto realizado en la Laguna del Carpintero estudia el polígono que rodea ese cuerpo de agua para analizar cómo la ciudad puede crecer sin dañar el espacio natural. 

Los trabajos comprenden estudios de las “islas de calor" de la zona conurbada y han evaluado fraccionamientos que tienen edificaciones verticales considerables. “Se evalúa cómo es el confort en estos espacios exteriores en los cañones urbanos".

La investigadora de la UAT explicó que están trabajando actualmente con los cuerpos de agua de Ciudad Madero: las lagunas El Chipus y Nuevo Amanecer, analizando cómo está la edificación circundante, la vegetación, las vialidades y la permeabilidad de la zona.

La investigación –dijo– pretende emitir indicadores que sirvan para mitigar el impacto del crecimiento urbano en ese espacio natural, “revivirlo, evitar que desaparezca; porque la ciudad está creciendo y estos espacios se están reduciendo".

“También se han analizado todos los espacios verdes en la zona conurbada, la accesibilidad, y se propone hacer un manual de estrategias para acceder a estos espacios naturales", subrayó.

Definió que los estudios también servirán para identificar los niveles de las edificaciones, los materiales, suelos y pavimentos. “También para medir los riesgos de inundaciones, erosión, y saber hasta dónde es posible construir y hasta dónde deberíamos dejar las áreas despejadas de vivienda y dedicarlas a espacios de recreación".

La profesora de la FADU advirtió: “Hay lugares que continuamente se están inundando, y lo que debemos hacer es marcar un perímetro para no estar invadiendo, porque es un problema para la gente que vive ahí; entonces hay que reubicarla, pensar en una construcción tipo palafito sería una de las estrategias". La construcción tipo palafito consiste en que las casas estén soportadas por pilares de madera o concreto.

Aseveró que es necesario integrar programas de ordenamiento y tener en cuenta que las ciudades con cuerpos de agua interior, como las de esta zona, constituyen un gran valor, pero, paradójicamente, se les está contaminando, rellenándolos como si fueran un problema cuando en realidad hay que revitalizarlos y aprovechar sus valores ecológicos.

Para finalizar, destacó que sería importante liberar los espacios más cercanos a las lagunas, contar con suelos más permeables e implementar más vegetación, luego de señalar que más del 80% de la zona conurbada está rodeada de cuerpos de agua.

“Está todo el sistema lagunario al poniente, al sur tenemos el río Panuco, al este el golfo de México; esto ha hecho que la ciudad no crezca dispersa, a diferencia de otras ciudades mexicanas que no tienen estos límites. De ahí la importancia de los proyectos", concluyó.

Colabora la UAT en la conservación del mangle en el litoral tamaulipeco

" La Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) realiza estudios enfocados en la vigilancia y monitoreo del estado de salud que guardan los manglares, con la finalidad de aportar datos que contribuyan en los proyectos de conservación y mitigación del impacto del cambio climático en los ecosistemas costeros de la entidad. "

Al respecto, el Dr. Leonardo Arellano Méndez, investigador de la Facultad de Ingeniería y Ciencias (FIC), explicó que en dichos estudios se utilizan drones multiespectrales y sensores remotos para evaluar el estado de salud y niveles de estrés de los manglares, debido a la importancia que representan para la biodiversidad y la mitigación del cambio climático.

Este trabajo científico facilita la identificación de áreas prioritarias para su restauración y aporta datos relevantes para la estimación de carbono orgánico capturado, contribuyendo así a estrategias de mitigación climática en Tamaulipas.

Como parte del trabajo académico, mencionó que se ha desarrollado una tesis de maestría dedicada a analizar el carbono orgánico en la Laguna Madre, lo que fortalece el conocimiento sobre el papel de los ecosistemas costeros en la captura de carbono y la reducción de los impactos ambientales.

El investigador también resaltó la vinculación entre la UAT, las autoridades estatales y la sociedad como eje fundamental para promover acciones conjuntas de conservación y restauración de manglares, cuyos ecosistemas están amenazados por la contaminación y el desarrollo costero.

Destacó que, en esta labor, estudiantes de la carrera de Ingeniería en Ciencias Ambientales de la UAT participaron recientemente en la siembra de 300 plántulas de mangle en Playa La Pesca, en Soto La Marina, como parte de un proyecto de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, para conservar y restaurar este ecosistema costero tan importante para el equilibrio ambiental.

El Dr. Arellano Méndez resaltó como un desafío prioritario el fortalecimiento de la infraestructura destinada a la investigación ambiental, contemplando la posible implementación de una unidad marina cercana a la costa que favorezca el trabajo de campo y extienda el alcance de los proyectos científicos.